Al final no fue para tanto, un simple golpe, aunque las imágenes daban pié a pensar algo peor, al final Messi no se lesionó de gravedad e incluso podría jugar el partido del próximo sábado ante el Betis.
Ayer ya se ejercitó en el gimnasio y según su evolución y la última decisión de Tito Vilanova su presencia en el Benito Villamarín sería posible.