El Barça no puede con el muro escocés y pierde 2-1 en Celtic Park ante el Celtic de Glasgow. Partido dominado por el Barcelona con juego, posesión, pero sin remate, el Celtic dos disparos a puerta dos goles. Cerrojazo atrás y salidas a la contra, lo habitual en los partidos contra el Barça. Normalmente para abrir estos partidos es importante abrir la lata, pero si el equipo está un poco espeso en ataque y no encuentra los huecos necesarios, el partido se complica. Messi y Alexis se toparon con el palo después del gol de Wanyama que llegó a rematar un corner en el segundo palo, 1-0. El Barça sufre a balón parado y faltas laterales, nuestra media es de 1,70 y jugamos contra torres de 1,80. Hay que hacer algo diferente para defender estas jugadas.

Pese a complicarse el partido, el Barça seguía generando oportunidades, rozando a veces el 90% de la posesión, el Barça tiraba de paciencia, pero una y otra vez se atascaban. En la segunda parte más de lo mismo, el Celtic cerraba por dentro y no le preocupaba dejar las bandas, además el portero Foster tuvo una gran noche. Messi, algo precipitado, sigue siendo el que tira del equipo en ataque, dos disparos desde fuera del área, una falta peligrosa, combinaciones, jugadas individuales, pero no había manera. Vilanova se fue por la victoria con los cambios, Pique por Bartra, Fabregas por Song y Alexis por Villa. Faltaba velocidad y más profundidad, pero aun así no se merecía perder. En otra jugada aislada, el Celtic con el gol de Watt, ponía el 2-0 en el marcador. Los azulgranas lo intentaron hasta el final, pero el 2-1 de Messi no fue suficiente para levantar el partido. Pese a la derrota, el Barça continua liderando el grupo, pero ahora habrá que luchar en las dos jornadas restantes por los puntos.