El Barça pasa por un bache futbolístico y hay menos claridad sobre el campo, una lástima tratándose de una o dos semanas cruciales de la temporada. El momento clave de la temporada ha llegado, de los próximos resultados que se obtengan dependerá pelear por títulos esta temporada. El Barça sufre, no cierra los partidos y en cada partido se recibe gol. Los azulgranas no se encuentran tan superiores a sus rivales y todo cuesta bastante más. Esta jornada, el Sevilla planteó un escenario similar al AC Milán, juntos atrás para salir a contragolpear, además dejaban las bandas para centrarse en el juego entre líneas de los locales. El Barça, con muchos cambios, no se encontró durante toda la primera parte. Los andaluces supieron detener el juego ofensivo del Barça y además se pusieron por delante gracias al gol de Botía 1-0, en uno de los pocos tiros a puerta.

Villa, Alexis, Thiago, Song y Montoya fueron titulares, el chileno fue cambiado al descanso por Tello. En la segunda parte se vio la reacción y el Barça remontó. Primero tras un centro de Alves que remató Villa para poner el 1-1, después una jugada colectiva permitió a Messi marcar el 2-1. Con el marcador a favor el Barça puso en práctica el futbol-control habitual no sin sufrir descargas en forma de ocasiones de gol del Sevilla, Baba, Negredo y Manu del Moral tuvieron oportunidades y Navas era constante en la derecha. El Barça intentaba a su vez sentenciar, pero no generó muchas más ocasiones. Messi, Tello o Villa pudieron hacer algún gol más, pero así llegarían al final. Llegan dos clásicos consecutivos, el vital es el de mañana de Copa del Rey, los azulgranas traen el 1-1 de la ida, todo por decidir, segundo match ball de la temporada.