La afición blaugrana empezamos acostumbrarnos a las goleadas del Barça y sobre todo a un resultado en concreto el 5-0. Después de golear a Villarreal, Osasuna o Atlético en la liga, el Barça sigue su buen nivel físico y futbolístico en la Champions League. El rival el Bate Vorisov que encajó un doloroso, pero comprensible 0-5 y es que el equipo bielorruso no superaría el décimo puesto en las mejores ligas europeas.

Tras el empate en casa ante el Milán en la primera jornada, ganar en Bielorrusia era fundamental y la goleada aupa a la primera plaza del grupo por delante de los italianos. Costó en los primeros minutos hasta el gol en propia de los bielorrusos que se encerraron atrás sin acomplejarse pese a jugar en casa ante su afición. El 0-2 lo consiguió Pedro tras un centro medido de Villa sin oposición. El Barça con marcador a favor y con la posesión es imparable y los goles irían llegando.

Una vez más apareció Messi algo más individualista que en partidos atrás. El argentino materealizó el 0-3 después de un regalo del portero rival. Ya en la segunda parte Messi conseguía el 0-4 el mejor de toda la noche tras una combinación con Alves. Guardiola comenzó a dar descansos y empezó con las rotaciones. Xavi, Abidal y Keita dejaron su sitio para Fabregas, Adriano y Maxwell. Villa cerró el partido con el 0-5 gracias una buena presión del equipo en los últimos minutos que dejaron a Villa solo ante el portero batiéndolo por bajo.