Los comienzos de liga nunca son fáciles, pero si encima comienza el campeonato muy cargado de partidos puede ocurrir lo peor. Barça y Madrid son los dos favoritos para poder llevarse la liga y es muy distinto como han comenzado uno y otro. Mientras el Barça solventó su debut ante la Real Sociedad, ganó la ida de la Supercopa y venció ayer en un partido milagroso, el Madrid lleva un empate y una derrota en liga y a un partido de perder la Supercopa. Es decir esta semana, el Barça se podría encontrar con un nuevo título y aventajando a los blancos en cinco puntos con solo 2 jornadas disputadas.
No aprendimos la lección del año pasado, de nuevo Osasuna sorprendió al Barça con un planteamiento agresivo y atrevido. Llorente adelantó al equipo rojillo 1-0. El Barça tuvo sus opciones, pero Messi no tenía el día, Fábregas muy retrasado intentó hacer de Xavi, pero su aportación fue nula. La defensa tuvo mucho trabajo para frenar las acometidas locales. Iniesta algo desacertado, tuvo el empate en varias ocasiones.
Comenzó bien la segunda parte Osasuna que cuajó un gran partido, incluso Nino tuvo el 2-0, pero su balón se fua al palo. Muñiz, discreto en el partido, tuvo más protagonismo en esta segunda parte expulsando a Vilanoba, pitando faltas dudosas y algún fuera de juego inexistente. Además fue protagonista en el empate del Barça, un rechace en el medio del campo iba a ser controlado por Puñal, pero molestado por el colegiado, fue Messi quien se hizo con el balón y montó la contra, Alexis y Pedro elavoraron y Messi marcaba el 1-1. Las protestas airadas de Puñal le costó la roja. El Barça por fin veía la luz, en un minuto había empatado el partido y jugaba con un hombre más. Poco tardo en generar la jugada del segundo gol. Triangulación entre Villa, Xavi y Jordi Alba para que Messi marcara el 1-2 final. Sufrió el Barça en los minutos finales pese a la superioridad, pero se consiguió la victoria. Partido para olvidar, ahora a centrarse en la Supercopa y en el partido contra el Valencia.